El factor humano y los errores del conductor están presentes en el 91% de los accidentes
El ser humano en muchas ocasiones es el único culpable del 91% de los accidentes que se producen. La mayoría de estos accidentes son provocados por despistes y que lamentablemente terminan en dramáticas consecuencias.
Los móviles es una de las principales causas de despistes, pero existen otras actuaciones que también influyen a la hora de sufrir un accidente.
- Los trayectos deben medirse en kilómetros no en tiempo. Nunca se debe fijar una hora de llegada, ya que eso provoca que los conductores pisen en acelerador más de la cuenta.
- Un conductor fatigado duplica el número de distracciones, aumenta su tiempo de reacción y se cometen más errores. Es muy importante parar para descansar. Recuerda lo importante es llegar.
- Cuando se viaja en grupo se multiplican las conductas de riesgo, ya que se suelen realizar adelantamientos precipitados y arriesgados para intentar circular todos juntos.
- Circular en las horas más peligrosas. Entre las dos y las cuatro de la tarde y durante la noche es mejor no conducir. Por la noche, la posibilidad de sufrir un accidente es mayor, sobre todo entre las dos y las cinco de la madrugada y al amanecer.
- En los viajes de ida, resultan especialmente peligrosos los kilómetros finales del trayecto, cuando se está cerca del destino se baja la guardia y uno se confía.
- Recuerda no llevar objetos peligrosos en los asientos. Cualquier cosa que se lleve en el asiento puede ser fatal, ya que puede provocar lesiones muy graves.
Fuente: motor.elpais.com
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