Después de largos viajes, calor extremo, carreteras secundarias y maleteros a tope, tu vehículo merece atención y cuidados.
Si quieres alargar la vida útil de tu coche y evitar averías sorpresa ten esto en cuenta:
6 cuidados esenciales para tu coche tras las vacaciones
- Revisa los niveles (aceite, refrigerante, líquido de frenos)
Después de muchos kilómetros y altas temperaturas, estos fluidos pueden haberse consumido. Reponer o cambiar es clave para el buen funcionamiento del motor. - Chequea neumáticos y presión
Busca desgastes irregulares, pinchazos o baja presión. Los neumáticos sufren mucho con el calor y el peso extra del equipaje. - Limpieza profunda (por dentro y por fuera)
Arena, salitre, barro… pueden dañar la pintura y el interior. Un buen lavado protege la carrocería y mantiene limpio el habitáculo. - Frenos y amortiguadores
Si notas vibraciones, ruidos o pérdida de eficacia, toca revisión. Han soportado más carga y uso que en tu día a día. - Filtro del aire y del habitáculo
El polvo de carretera o la ventilación constante pueden saturarlos. Cambiarlos mejora el rendimiento del motor y la calidad del aire interior. - Batería y luces
Si tu coche ha pasado tiempo parado o con un uso intenso, conviene comprobar el estado de la batería. También asegúrate de que todas las luces funcionen correctamente.
Consejo extra:
Si tu coche ha pasado por caminos de montaña, lluvia intensa o zonas costeras, revisa también bajos y sistema de escape, ya que podrían haber acumulado suciedad o corrosión.
Una revisión sencilla, y evitarás sustos con tu coche .