Cuando eliges el color de tu coche, probablemente la estética y el gusto personal sean los factores que más influyen en tu decisión. Pero ¿sabías que algunos estudios han analizado si ciertos colores podrían ser más seguros que otros en la carretera? La respuesta no es tan sencilla como parece.

Mitos sobre los colores de los coches y la seguridad.

A lo largo del tiempo, han surgido diversas creencias sobre la relación entre el color de un coche y su seguridad. Uno de los mitos más extendidos es que los vehículos de color negro son más propensos a sufrir accidentes porque son menos visibles, especialmente en condiciones de poca luz. Si bien esto tiene algo de lógica, la realidad es más compleja y no se reduce únicamente a la tonalidad del automóvil.

¿Qué dicen los estudios recientes sobre el color y la seguridad vial?

Investigaciones actualizadas han explorado cómo el color de un vehículo puede influir en su visibilidad y, en consecuencia, en la seguridad en carretera. Aunque no hay un consenso absoluto, algunos hallazgos son dignos de mención:

• Visibilidad en carretera: Los coches de color blanco siguen siendo considerados los más visibles en diversas condiciones de iluminación. Al reflejar más luz, son más fáciles de detectar tanto de día como de noche. Otros colores claros, como el amarillo y el plateado, también pueden mejorar la visibilidad.
• Incidencia en accidentes: Aunque algunos estudios han indicado que los vehículos oscuros pueden estar ligeramente más involucrados en accidentes debido a su menor visibilidad, la diferencia no es tan significativa como para afirmar que un color específico es «peligroso». Factores como el comportamiento del conductor, el estado de las carreteras y las condiciones climáticas tienen un impacto mucho mayor en la seguridad.
• Efecto en la temperatura interna: Aunque no influye directamente en la seguridad vial, el color del coche puede afectar la temperatura en su interior. Los vehículos de colores oscuros absorben más calor, lo que puede hacer que sean más calurosos en climas cálidos, mientras que los colores claros ayudan a mantener una temperatura más baja dentro del automóvil.

Elegir un tono que te guste es importante, pero más allá de la estética, lo fundamental es adoptar hábitos de conducción segura: respetar las normas de tráfico, mantener una velocidad adecuada y estar siempre atento a las condiciones del entorno.