Primavera (marzo – mayo): temporada fuerte
Es, por lo general, el mejor momento del año.
Con la llegada del buen tiempo:
- Aumentan los viajes y desplazamientos.
- Muchos conductores hacen revisiones y puestas a punto.
- Talleres y almacenes trabajan al máximo nivel.
Se disparan las ventas de aceites, filtros, frenos, neumáticos y baterías.
Verano (junio – agosto): mantenimiento y emergencias
- El calor y los viajes largos hacen que los talleres estén activos.
Suben los recambios de aire acondicionado, refrigeración y sistemas eléctricos. - También hay más averías por calor y desgaste por trayectos largos.
Pero ojo, en agosto muchos talleres cierran por vacaciones, así que la actividad baja ligeramente a mitad del verano.
Otoño (septiembre – noviembre): segundo pico del año
Después del verano, los conductores preparan el coche para el frío.
Suben las ventas de:
- Limpiaparabrisas, baterías, calefacción y neumáticos de invierno.
Es una segunda buena temporada para los almacenes de recambios.
Invierno (diciembre – febrero): temporada más tranquila
Durante el invierno la actividad baja un poco.
Los conductores viajan menos y los talleres suelen estar más tranquilos.
Aun así, se mueven recambios de arranque, calefacción y anticongelantes.
Los mejores meses para los almacenes de recambios son primavera y otoño, cuando los vehículos se preparan para los cambios de estación y los talleres están a pleno rendimiento.





