No nos cansaremos de repetirlo. El manejo de un tractor requiere una atención constante y rigurosa, ya que cualquier distracción puede tener graves consecuencias tanto para el conductor como para quienes lo rodean. A pesar de ser una herramienta fundamental en la agricultura, su tamaño, peso y potencia lo convierten en una máquina peligrosa si no se opera con responsabilidad.
Entre los principales riesgos de no estar atentos al manejar un tractor se encuentran los accidentes por vuelco, que suelen ocurrir en terrenos irregulares o con pendientes pronunciadas. Además, la falta de concentración puede llevar a colisiones con otros vehículos, maquinaria o incluso personas que se encuentren cerca. No prestar atención al estado del terreno o a las condiciones climáticas también puede resultar peligroso, ya que el suelo resbaladizo o mojado incrementa las probabilidades de pérdida de control.
Otro factor clave es el manejo de la maquinaria que suele acompañar al tractor. No detenerse a verificar el estado de las herramientas acopladas, o realizar giros y maniobras bruscas, puede provocar accidentes graves. El conductor siempre debe estar al tanto de las zonas de peligro, como las cuchillas o los engranajes móviles, para evitar atrapamientos o cortes.
Para minimizar riesgos, es imprescindible que el operador reciba la formación adecuada y utilice siempre las medidas de seguridad, como el cinturón de seguridad y la jaula antivuelco. Igualmente, es recomendable realizar revisiones periódicas al tractor y mantenerlo en óptimas condiciones de funcionamiento.
Recuerda, un segundo de distracción puede tener consecuencias irreversibles. Mantén siempre la atención al 100% cuando estés al volante de un tractor.