Conducir con lluvia
La lluvia es el fenómeno con el que más accidentes ocurren. De cada tres accidentes que ocurren, en dos estaba presente la lluvia. Hay que tener en cuenta que con lluvia las condiciones de visibilidad y de la carretera cambian, lo que hace que las pautas que se deben seguir nos permitan circular con mayor seguridad, como por ejemplo: reducir la velocidad y aumentar de distancia de seguridad.
Imprescindible tener el coche siempre a punto, las escobillas, líquido del limpiaparabrisas, las ruedas, las luces… Ahora los coches incorporan ayudas que redundan en la seguridad, pero eso no debe hacernos confiar por completo en ese punto, lo importante es que nos adaptemos a la circunstancias de la conducción.
Con lluvia, procura frenar con suavidad ya que con el agua la distancia de frenado aumenta y las ruedas se bloquean a pesar del ABS. Presta atención a la señalización horizontal ya que puede suponer un peligro, evita pisar las rayas con la dirección girada, ni acelerar cuando las ruedas de tracción se encuentren encima de las líneas blancas de la carretera, además presta atención a los pasos de peatones y no frenes cuando ya estés encima del paso de cebra.
Procura estar atento a todo lo que ocurre en la carretera y nada de móvil.
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